Hoy en día el concepto de azar se encuentra inmerso en diversas áreas del conocimiento científico. Por ejemplo, en la teoría de la evolución de las especies se asume que éstas surgen al azar, en la teoría genética se sostiene que las características de una determinada especie se transmiten de manera azarosa de un individuo a otro, en la física estadística se estudia un gas imaginando que las moléculas que lo componen se mueven al azar en diferentes direcciones y con diferentes velocidades, en la mecánica cuántica se piensa al azar como algo intrínseco en el comportamiento de la naturaleza a nivel microscópico, en la teoría del caos se estudian sistemas dinámicos regidos por ecuaciones deterministas pero muy sensibles a pequeños cambios en las condiciones iniciales, de tal forma que su comportamiento a largo plazo parece azaroso.

La revolución científica del siglo XVII hizo surgir la idea de un mundo que funciona como una gran máquina cuyo movimiento está totalmente determinado hasta sus más pequeños detalles. De acuerdo con esta idea, el universo completo está regido por leyes deterministas, de carácter universal, de tal forma que la evolución del universo queda determinada por esas leyes y su estado en un momento dado. La ciencia en el siglo XVIII se desarrolló bajo esta idea con resultados sorprendentes en diferentes áreas; todo encajaba en ese modelo determinista mecanicista. Pero esta concepción comenzó a resquebrajarse, desde dentro de ella misma, con los avances científicos de la segunda mitad del siglo XIX; un nuevo paradigma comenzó a gestarse, el cual se afianzaría plenamente durante el siglo XX.

El nuevo paradigma está vinculado de manera esencial con el azar y la teoría de la probabilidad, la cual, curiosamente, surgió también en el siglo XVII y se desarrolló paralelamente con la concepción determinista mecanicista.

El concepto de azar ha ido penetrando profundamente en el pensamiento científico, a tal grado que mucho de las llamadas leyes de la naturaleza se expresan actualmente en términos de probabilidades.

Pero, ¿qué es el azar?

Este trabajo intenta dar elementos para poder acercarse a una respuesta de esta pregunta. Para esto haremos un recorrido histórico analizando cómo se han interpretado a lo largo del tiempo situaciones en las cuales hoy diríamos que hay azar. Analizaremos las conceptualizaciones del azar en diferentes culturas, comenzando por las primeras grandes civilizaciones (Egipto, Mesopotamia y China) y culminando con el concepto de azar en las teorías científicas de nuestra época.